Entras en casa y traes cervecita y una sonrisaca, diciéndome con los ojos que no pasa nada, que podemos pasarlo bien.
Llegáis en tropel, arrasando y trayendo hojas secas, barro y un pellejo que, al mirar más de cerca, veo que es un gato. Deprisa, aceleradas, vomitando las experiencias de los últimos días.
Llegaste sóla, aturulladas tus emociones, buscando un abrazo y perdida entre tantos sentimientos. Me miraste desde dentro y me pediste un hombro pa' llorar, sin lágrimas, entre risas.
Abres la conversación del chat y tonteas, juegas a que estamos hablando y yo te sigo el rollo, como si no vivieras tan lejos, como si te pudiera abrazar luego.
Antes de irte de casa pasas la escoba por todo el salón, recoges la cocina y me lo dejas todo preparadito para que no haga esfuerzos.
Mandas un sms tontorrón, con sonrisillas escondidas en la cara oculta de la luna.
Porque sabéis qué necesito casi mejor que yo, y me lo dáis. Porque si deseara que me dierais algo, lo estropearía. Porque la sorpresa de vuestros cuidados tiene doble buen sabor; la sorpresa y los cuidados.
Llegáis en tropel, arrasando y trayendo hojas secas, barro y un pellejo que, al mirar más de cerca, veo que es un gato. Deprisa, aceleradas, vomitando las experiencias de los últimos días.
Llegaste sóla, aturulladas tus emociones, buscando un abrazo y perdida entre tantos sentimientos. Me miraste desde dentro y me pediste un hombro pa' llorar, sin lágrimas, entre risas.
Abres la conversación del chat y tonteas, juegas a que estamos hablando y yo te sigo el rollo, como si no vivieras tan lejos, como si te pudiera abrazar luego.
Antes de irte de casa pasas la escoba por todo el salón, recoges la cocina y me lo dejas todo preparadito para que no haga esfuerzos.
Mandas un sms tontorrón, con sonrisillas escondidas en la cara oculta de la luna.
Porque sabéis qué necesito casi mejor que yo, y me lo dáis. Porque si deseara que me dierais algo, lo estropearía. Porque la sorpresa de vuestros cuidados tiene doble buen sabor; la sorpresa y los cuidados.