Hace rato que estoy sola.
Vivo sola, y no me duele la soledad pues no me falta compañía.
A veces me visitan, otras, salgo y tardo tanto en volver que mis plantas me miran amarillas del susto (pobres).
Otras veces nado en el sofá con mil amigxs de mundos fantasiosos mientras Mr. Cohen me susurra poemas al oído.
En ocasiones miro la puerta que me regaló Noah; una puerta que está siempre abierta y que lleva a donde yo quiera ir.
Me baño y dedico el rato que quiera a acicalarme, me aceito me peino me pinto me quiero... y me siento nueva.
Estoy conmigo, y aunque me falte... no quiero echar de menos.
Vivo sola, y no me duele la soledad pues no me falta compañía.
A veces me visitan, otras, salgo y tardo tanto en volver que mis plantas me miran amarillas del susto (pobres).
Otras veces nado en el sofá con mil amigxs de mundos fantasiosos mientras Mr. Cohen me susurra poemas al oído.
En ocasiones miro la puerta que me regaló Noah; una puerta que está siempre abierta y que lleva a donde yo quiera ir.
Me baño y dedico el rato que quiera a acicalarme, me aceito me peino me pinto me quiero... y me siento nueva.
Estoy conmigo, y aunque me falte... no quiero echar de menos.